Justamente la belleza del asunto
radica en que no te conozco para nada
y entonces todo es siempre nuevo y sorpresivo,
de buena y mala gana, porque no estoy contigo,
porque no estás conmigo, porque siempre estamos solos,
porque no recuerdo tu cara: la tengo grabada.
Porque no tengo nada mío ni tuyo, no tengo nada,
porque no me importa si vienes o te vas,
si vuelas o caes en el vacío;
no me importa si caminas o te quedas,
sólo sé que me gusta recordarte de vez en cuando
muerta de risa, ahogada en suspiros.
Me gusta recordarte porque estás viva
aún cuando no te conozca,
siempre y cuando no seas quien yo digo,
me gusta recordarte aunque no estés conmigo...
Erik S.G.P.
-12-IX-'08-
2 comentarios:
"la belleza del asunto radica en que no te conozco para nada y entonces todo siempre es nuevo y sorpresivo"...
cuánta maldita verdad.
porque la aburrición del asunto radica cuando conocemos demasiado y todo siempre es PAN CON LO MISMO...jajajaja.
pero la verdad, también es bonito re-conocer.
saludos chilangos
ya escribeeee
Publicar un comentario